Los avances tecnológicos impactan en todos los sectores y los supermercados no se quedan atrás. El pago electrónico mediante dispositivos móviles ha sido uno de los cambios más revolucionarios, pero la próxima modificación impactará en los tradicionales carritos de la compra.

La práctica de usar monedas para acceder a los carritos de supermercado en España está en vías de extinción, gracias a la innovación tecnológica de la Comunicación de Campo Cercano (NFC, en inglés).

Su objetivo es facilitar el uso de los carritos de compra y agilizar las transacciones. Fuente: Archivo

 

El NFC permite la transferencia de datos de forma inalámbrica a corta distancia, una innovación cada vez más integrada en la vida diaria y que está pronta a debutar en los supermercados de España.

Su objetivo es facilitar el uso de los carritos de compra y agilizar las transacciones, a la vez que proporciona información para estrategias de fidelización de clientes, de acuerdo a lo que plantea una nota de La Grada Online.

La nueva tecnología en los carritos de la compra

La implementación de estos carros de compra en los supermercados aún tiene detalles por definir, entre ellos, el procedimiento para desbloquear un carrito y si el mismo implicará acercar un teléfono a un lector NFC o escanear un código QR en el carro.

Esta acción identificará al usuario y cobrará una «fianza», que se devolverá al finalizar la compra de la misma forma en que el consumidor recupera su moneda en los carritos tradicionales.

Otra característica de esta tecnología es que los productos se registran automáticamente en el carro, y el pago se realiza utilizando nuevamente el NFC o el código QR. Este sistema se encuentra en uso en otros países y podría ser una realidad pronto en España.

Esta tecnología permite a los consumidores realizar sus compras de manera más eficiente, evitando colas en caja y reduciendo el tiempo de compra. Además la recopilación de datos sobre las preferencias y hábitos de compra de los clientes posibilita estrategias de marketing más personalizadas.

Si bien no hay una fecha concreta, la tendencia global sugiere que la adopción de estas tecnologías en el comercio minorista es cada vez más cercana. Países como Alemania, Suecia y Japón ya están implementando sistemas parecidos con éxito.

La adaptación de los supermercados a estas tecnologías garantiza menos tiempo en cajas, mejor flujo de clientes y servicios más personalizados, lo que podría incentivar a España a seguir el ejemplo de los demás países europeos.